miércoles, 18 de agosto de 2010

Wikileaks se refugia en Suecia para resistir las presiones de EU

ESTOCOLMO, Suecia, agosto 18.- Bajo presión en Estados Unidos y cuestionado por algunas ONG tras la publicación de decenas de miles de documentos clasificados sobre la guerra de Afganistán, el portal Wikileaks encuentra cobijo en Suecia. El Partido Pirata, fundado en 2006 y que pide liberalizar las leyes de derechos de autor y reducir la vigilancia en internet, acogerá varios servidores de la organización, según anunció ayer la formación política del país nórdico. "La contribución de Wikileaks es tremendamente importante para el mundo entero", dijo Rick Falkvinge, líder del partido.

"Deseamos contribuir a cualquier esfuerzo que aumente la transparencia y que ayude a que los poderosos rindan cuentas", afirmó el político sueco, que acordó la colaboración con Wikileaks en una reunión que tuvo en Estocolmo con el fundador del portal, Julian Assange.

El Partido Pirata proporcionará ancho de banda y alojamientos para los servidores de Wikileaks. Si la formación política ganase algún escaño en el Parlamento sueco en las elecciones legislativas previstas para el 19 de septiembre, sus servidores, incluidos los que acogen a Wikileaks, contarían además con inmunidad parlamentaria. El grupo sueco aseguró que el apoyo al portal es parte de su "misión política".

El Partido Pirata, que se presentó en 2006 a los comicios generales en Suecia y se hizo un modesto 1% de los votos, multiplicó por siete su resultado en las elecciones europeas de junio de 2009: el 7,1% de votos que obtuvo le permitió ganar uno de los 18 escaños que Suecia ocupa en la Eurocámara, gracias sobre todo al apoyo de los jóvenes. El partido aboga por la eliminación del sistema de patentes y la despenalización del intercambio de archivos en internet.

"Damos la bienvenida a la ayuda proporcionada por el Partido Pirata. Nuestras organizaciones comparten muchos valores y si miramos al futuro podemos ayudarnos mutuamente a mejorar el mundo", dijo Assange. El portavoz de la organización también expresó su deseo de que el Parlamento sueco que saldrá de las elecciones "considere seriamente" fortalecer aún más la legislación de protección de la prensa en el país. Luego, el fundador de Wikileaks, una figura tan enigmática como la organización, no olvidó recordar que las democracias occidentales "no son siempre tan libres como se podría pensar".

La colaboración del partido sueco da aliento a la organización de Assange, en la cuerda floja desde que publicó a finales de julio los papeles que relatan los errores cometidos en el conflicto afgano desde 2004 hasta 2009. Hace apenas una semana, cinco ONG? entre ellas Amnistía Internacional, que en 2009 premió a Wikileaks por sacar a la luz informes sobre unas matanzas en Kenia? instaron al portal a borrar de los papeles de Afganistán los nombres de los afganos que colaboran con las fuerzas internacionales en el país y que pueden ser víctimas de represalias. También el Pentágono pidió a la organización que retirara los documentos de su página web.

Hasta el momento la respuesta de Wikileaks siempre ha sido negativa. Assange se limitó a pedir a los que plantean la retirada de los documentos su colaboración en la tarea de identificación de los nombres de las personas que pueden verse afectadas. "Estoy muy ocupado y no tengo tiempo de lidiar con quienes prefieren no hacer nada mientras se cubren las espaldas", dijo Assange en respuesta a las críticas de las ONG. Mientras tanto, anunció la inminente publicación de otros 15,000 archivos clasificados sobre la guerra de Afganistán, pertenecientes al mismo paquete de los 77,000 que divulgó en julio.

Wikileaks solicitó ayuda al Pentágono para analizar los documentos y evitar la publicación de los que pueden perjudicar a personas inocentes, según explicó Assange. Y ayer la agencia France Presse, citando declaraciones de una responsable del portal, aseguró que el Ejército estadounidense había aceptado colaborar. "Han dicho que están listos para abrir un diálogo", declaró Kristinn Hrafnsson.

El Pentágono negó tales contactos, según informó poco después la misma agencia. "No estamos interesados en negociaciones para llegar a una versión aséptica de documentos clasificados", dijo en declaraciones a la prensa Bryan Whitman, portavoz del Departamento de Defensa. El portavoz reiteró en cambio la que viene siendo la petición de Washington desde la publicación de los papeles que "ponen en riesgo la vida de los militares y de los afganos": que Wikileaks "devuelva los documentos, los retire de Internet y no publique ninguno más".

Fuente: www.elpais.com

'Hay que fotografiar los muertos porque se trata de una guerra'

Alejandro Cossío es el ganador del premio de fotografía de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano. Sus imágenes de Tijuana retratan la violencia despiadada del narcotráfico mexicano

Madrid, España, agosto 18.- Armas, militares y cadáveres. Sobre todo cadáveres: cubiertos por una manta, colgados de un puente, acribillados en grupo o en solitario, con los brazos atados detrás de la espalda o dejados así, como la muerte, en forma de balas, los ha sorprendido. Este es el día a día de un fotoperiodista que vive en Tijuana, México. Con una selección de su trabajo, Alejandro Cossío ha ganado el premio Nuevo Periodismo CEMEX+FNPI en la modalidad de fotografía de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano fundada por el escritor Gabriel García Márquez en 1994. Alejandro tiene 35 años, nació en la ciudad de Los Mochis en el Estado de Sinaloa (noroeste del país). Desde los 8 años vive en Tijuana, la ciudad fronteriza con Estados Unidos que ha vivido en los últimos años un recrudecimiento de la violencia del narcotráfico. Decidió titular su trabajo México en el punto de quiebre: "Llevo trabajando en el tema 13 años, desde que empecé en el Semanal Zeta , que siempre se ha caracterizado por tratar temas fuertes. Siempre he estado con ellos, a parte de lo que hice con agencias como freelance. Ahora la situación se ha calmado en Tijuana, pero en 2008 y 2009 empeoró bastante y me puse a documentarlo aún más".

¿Qué supone este premio para usted?
El premio es halagador, pero no cambia nada. Es un ratito de fama y nada más. Solo es una señal de que está bien mi trabajo y de que tengo que seguir por el mismo camino. A parte, espero que me pueda abrir la posibilidad de preparar proyectos más grandes.

¿Qué diferencia, para usted, el fotoperiodismo del periodismo escrito a la hora de reflejar situaciones como la de México?
El fotógrafo tiene que estar en la línea de fuego. Si no, llegas al lugar en el que han pasado las cosas y no tienes foto. El que escribe puede hacer llamadas después, pero el fotógrafo o llega o llega, no hay otra. Tienes que ir allí aunque solo sea para tomar lo último, cuando van a recoger el último casquillo. En la fotografía es un poco más complicado no caer en la obviedad, en la imagen cliché. Hay que luchar contra ese tipo de imágenes.

¿Cómo lucha usted frente a eso?
Tienes que estar informándote constantemente sobre el tema que estás cubriendo, aunque no escribas. De ese modo, cuando llegas al lugar puedes ver más detalles de lo que está pasando y tener más fotos en tu vista.

¿Qué significa ser fotoperiodista del narcotráfico en México? Quizá el miedo juegue un papel importante...
No es miedo, porque con el miedo te petrificas y no puedes hacer nada. Pero sí que debes tener precauciones, mirar hacia un lado y hacia el otro. En la actualidad aquí en Tijuana no hemos recibido amenazas. En el resto del país, sin embargo, las cosas se están poniendo muy muy feas.

El suyo no es el único trabajo periodístico sobre narcotráfico en México que ha conseguido un premio. Este año ha ganado el Ortega y Gasset Judith Torrea, que trabaja en Ciudad Juárez. ¿Qué diferencias hay entre las dos ciudades?
Yo nunca he ido allí, así que de primera mano no puedo decir nada. En cualquier caso, mis compañeros me comentan que el ejército no te deja hacer bien tu trabajo. En Tijuana, parece que hasta te abren la puerta y dicen "Pasa y mira lo que incautamos".

Tuvo que fotografiar a un compañero suyo del Semanal Zeta al que habían matado. ¿Fue el momento más duro de su carrera?
No sé si el más duro, pero fue el que definitivamente me dio una impresión de impotencia y de tristeza. Cuando llegué y reconocí el coche del editor de Zeta, se me empezó a nublar la vista, porque caí en la cuenta de que era él. Pero recompuse el ánimo y empecé a hacer fotos. Solo después, al mirar las imágenes, me enteré de que el que estaba viendo al muerto era su propio hermano. En esos momentos vas en automático.

Alguna vez ha dicho que la Policía no hacía lo suficiente para derrotar a los criminales de los carteles. ¿Qué se puede hacer para combatir la corrupción?
Yo no quiero decir que sea toda la policía, pero hay muchos elementos que trabajaban para uno u otro cartel y muchas investigaciones publicadas por Zeta lo demuestran. ¿Qué hacer? Lo más básico sería votar a otro partido político que haga algo. Pero lo haces y no cambia nada. Me gustaría tener una varita mágica, pero no la tengo.

¿Por qué empeoró la situación en Tijuana a partir de 2008?
Por lo que se refiere a Tijuana fue la más clásica de las luchas por el poder. El cartel de los Arellano Félix se dividió en dos cuando detuvieron a la cúpula. Dejaron a la cabeza a su sobrino, que es uno al que le llaman "El ingeniero". Uno de los lugartenientes que trabajaba con los viejos jefes dijo: "¿Por qué tengo que trabajar por este chaval?" y ahí empezó una guerra por el cartel. El año pasado detuvieron a la mitad de una de estas bandas y a dos cabecillas a los que apodaban el Teo y el Muleta. Allí las aguas se han calmado. Luego, cada región tiene sus problemáticas particulares que desembocan todas en lo mismo: violencia, drogas, secuestros.

¿Qué se ha conseguido con la política de Felipe Calderón (el presidente de la República)?
Solo se ha conseguido que aumente la violencia. Yo pienso que Calderón no traía malas intenciones, tenía ganas de entrarle duro, coger por los cuernos el toro del crimen organizado, cosa que no hizo Vicente Fox (el anterior presidente), pero ellos le han contestado: "No, espérate papito, nosotros vamos a seguir trabajando y tú no vas a conseguir que nos retiremos". Resumiendo, no tenía malas intenciones, pero no tiene ni la inteligencia, ni el poder suficiente para ganarles, por lo menos en los seis años de su mandato.

¿Pero cuál eran las alternativas, si no enfrentarse a los carteles cara a cara?
Tal vez le falló la estrategia. En 2007, cuando se anunció la guerra contra el crimen organizado, el Ejército entró en Tijuana y desapareció cada tipo de crimen, desaparecieron los muertos tirados por la calle. Allí el impacto psicológico fue muy importante, los habían dominado. Pero en poco tiempo los carteles se fueron dando cuenta de que los militares no tenían todo este poderío y emperezaron a contestarles de tú a tú.

¿De las imágenes que te hicieron ganar el premio, cuál es la que representa mejor tu idea de fotoperiodismo?
La que se ve una mano cayendo de una furgoneta. Solo con un detalle se pueden decir muchas cosas, sin tantos muertos, aunque también es necesario fotografiarlos para hacer énfasis en que hay muchos, que se trata de una guerra.

Fuente: www.elpais.com