Ciudad de México, septiembre 6.- Las amenazas, intimidaciones y secuestros en México obligan actualmente a los periodistas de este País a ejercer su profesión bajo un esquema de guerra, aseguró Ignacio Ramonet, director de Le Monde Diplomatique en español.
"Según el lugar de México donde los periodistas se encuentran es obvio que los periodistas deben tener cada vez más una mentalidad de periodismo de guerra", señaló el intelectual especialista en geopolítica.
"Evidentemente el periodismo, al igual que otras actividades, no puede vivir normalmente en un país en donde cada vez más, en algunas zonas, por lo menos, están en una situación casi de guerra. La guerra modifica todo. Es el traumatismo más importante en el que puede vivir una sociedad".
De acuerdo con Ramonet, la situación de México puede compararse a la que han vivido países con conflictos como Colombia, El Salvador y Guatemala.
Un informe reciente de
Apenas la semana pasada, un comando abrió fuego contra la fachada del diario El Noroeste, en Mazatlán. Un día después el mismo periódico recibió la amenaza de que harían volar su edificio si no pagaban cuotas a presuntos narcotraficantes.
En agosto un coche-bomba estalló en Ciudad Victoria frente a las instalaciones de una televisora, mientras que julio fue calificado como un mes trágico para la prensa en México por la organización Reporteros Sin Fronteras, ante asesinatos y secuestros de profesionales de los medios.
México ha sido señalado como el lugar más peligroso para ejercer el periodismo en América Latina.
"Éste es un tipo de guerra donde hay amenazas a la familia, a los patrones de la prensa. Hay temor a la represalias, se pone en peligro a la familia", dijo Ramonet, de visita en Monterrey para participar en un coloquio internacional de
"Se sabe que en México el periodismo siempre ha sido una profesión muy peligrosa. Creo que este año es el País donde más profesionistas se han asesinado".
El también consultor de
"No se puede hacer como que las cosas son normales cuando no son normales. Cuando hay decenas de miles de muertos", dijo.
"No se le puede pedir a un periodista que arriesgue su vida, pero es obvio que los periodistas deben organizarse para protegerse".
Fuente: www.elnorte.com